jueves, 27 de junio de 2013

Crashdummy

El tiempo, se coagula, y comienza a interferir de nuevo.
El tiempo, nos comprime.
Limita.
El sujeto que somos, ahora, no es ni será sujeto, de prueba alguna, ni esclavo del tiempo ni del sonido, si escucha al ruido infinito, como asceta se moverá entre la miel del visir y se vestirá de éter.
Deformará el tiempo para sentirse y respirar más libre.
Y no importará divisar lo mediocre, lo irascible, lo incomprensible, lo insano, lo idiota.
No importará comprender, porque no hace falta.
Puede, y siempre pudo, por más frágil y reacio que sea, romperse y lanzarse, del ruido hacia la nada, y viceversa. Caerse.
Volver, a descomponer el tiempo, por siempre.
Ahora o más tarde.
O nunca.

Mauro Varela

No hay comentarios:

Publicar un comentario