miércoles, 16 de enero de 2013

Impresiones del individuo terrestre (I-IX)

Y yo pensé que me volví uno
Y pensé, que me volví uno de ellos
Ah, me pensé como uno de ellos
Y ellos me quebrantaron a esto
¿O tan solo a ser como ellos?
~


 "Fue en una redada, un pongrom en esa ciudad de humo, en un albergue entre tantos nidos rotos. Encontramos una familia. Estaban consternados. Y el padre... Ese padre disparó a los torsos de sus crías. Heridas, gritaban y se retorcían. Él también se disparó hasta que colapsó. Y él murió. Los 'sanamos' y recuperamos a nuestros caídos, esos que ellos llaman muebles. Fue la escena más repulsiva que ví de estos seres."
~
Contrae ya tus pies
Déjalos crecer, como mis brazos
Y da una mirada ciega
Ya escapamos de estas sombras
Les toca ya, escupirlas y ofrendárselas a la gran tierra
~
Así es como dictamos e ignoramos
Cada suplica, cada llanto cortado
Pánico en las urbes del mundo
Pánico en un mundo trastornado
Y en cada vil ser que en ello conspiró
~
No, ahí no hay vida
En tus monumentos no se encuentra ninguna gloría
No, ahí no hay alma
En tus culturas no hay más que escorias
~
Suelta ya tus sueños, expíalos
Ricos frutos de tus sangres caerán
Ninguna palabra nos retiene
¿Es que acaso alguien acá 
pudo interesarse tanto
en nuestra fiera soledad?
~
Es que nuestra madre muere
de un salvaje mal.
Y la sanación es el costo
de la muerte del hijo menor.
Pánico en las ciudadelas del mundo
Pánico en un mundo colapsado
En el que el mayor se abalanzó sobre el menor.
~
No, ahí no hay sangre
En tus ciencias no hay un solo genio
No, ahí no hay luz
En tu historia solo se esconden farsas
No, ahí no hay vida
En tus ideologías y filosofías solo encuentro ego.
No ahí no hay alma.
En tus artistas que sufren no hay ninguna esencia.
~
Mis brazos largos como alabardas, te elevan.
Espero con un fuerte miedo, que nuestra madre me perdone.
Mi mente tensa y de avanzada, me lo obligó.
Con un miedo aún más intenso, espero no ser como vos.


Mauro Varela

No hay comentarios:

Publicar un comentario